En Artesanía Basma seguimos apostando por la calidad y por ello os traemos dos de las marcas líderes en el sector de la cosmética ecológica como son Hemani, entre cuyos aceites destacamos el aceite de Amla, en el que destacamos su alto contenido de nutrientes, conocido por sus increíbles propiedades para el cuidado del cabello, combatiendo su caída y debilitamiento. Procedente de la medicina tradicional del subcontinente indio, ya que es procedente de un árbol nativo de la India llamado grosella espinosa india. Todas las partes de este árbol, incluida la corteza, se utilizan para el bienestar y la salud del cabello. El fruto del árbol de Amla contiene alrededor de 82% de agua, además de proteínas, grasas, minerales, vitaminas y carbohidratos. Pero sobre todo este componente es famoso por su alto contenido de vitamina C.
También hemos de destacar los beneficios que ofrece el aceite de Rosa Mosqueta, también muy usado dentro de la cosmética marroquí. El aceite de Rosa Mosqueta puede ser utilizado para ayudar a atenuar estrías, cicatrices y arrugas en la línea de expresión, la cual posee un potente efecto regenerador y emoliente sobre la piel, ya que es rico en ácidos grasos como ácido oleico, linoleico, además de vitamina A.
El aceite de ricino es otro de los fundamentales de la cosmética marroquí. En Artesanía Basma ponemos a la disposición de nuestros clientes aceite de ricino de marca Bio Bética, 100% bio. Su efecto hidratante, siendo ideal para pieles secas, descamadas, eccemas, herpes o heridas superficiales de la dermis. Este aceite también se puede utilizar diluido en tu champú habitual, dotando así a tu cabello de un aspecto sano, saludable, brillante y suave, así como para tratar la caspa.
El producto estrella, sin duda alguna, de la cosmética marroquí es el aceite de Argán, un árbol patrimonio de la humanidad desde 1998 que solo crece en Marruecos. Su aceite elaborado a partir de las semillas de este árbol es un hidratante de calidad sin igual tanto para la piel como para el cabello, ayudando también a restaurar la elasticidad de la piel y a la regeneración de la piel quemada.
